El principio del estilo Zen se basa en una decoración Oriental, donde recreamos un ambiente de paz, equilibrio, armonía, relajación…
Los colores son neutros, marfil, beige, grises, blanco, en definitiva inspírate en los colores de la naturaleza, sin son más fuertes puedes usarlos como elementos decorativos. El principio es transmitir calidez y dar amplitud al espacio, los papeles con texturas naturales, quedan muy bien para destacar paramentos, bien sea en un cabecero de la cama, salón o entrada al local.
A la hora de elegir materiales, madera en tonos claros para suelos, pero si pensamos en el mobiliario mejor los oscuros como vengué tallados artesanal pueden dar un toco exótico. Simplifica el mobiliario y elije bien los objetos decorativos que vas a usar.
La luz natural es muy importante, pero intenta tamizarla, usa cortinas de lino o algodón que la filtren, también puedes usar sobre ellos estores de madera oscura, son señoriales y muy elegantes. La iluminación artificial mejor indirecta, coloca puntos de luz en zonas bajas, suelo o rodapié, pequeños focos con lamparas led.
La importancia de los aromas, jardines y plantas también ayudan a crear un ambiente sereno y relajado.
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